jueves, mayo 04, 2006

LA SUERTE ESTÁ HECHADA!

Primer día en el nuevo ámbito universitario, nervios propios por los cuales no dormí en toda la noche anterior.
Regreso de clases, me quedo dormida en el colectivo de regreso y me paso como 40 minutos de casa. Me despierto sobresaltada, me bajo en la primer parada próxima ofuscada por mi torpeza y por no tener un cospel para volver a casa ( los colectiveros NUNCA reciben el equivalente en dinero asi te estés muriendo). Oh casualidads cuando logro darme cuenta estaba frente a un kiosco. Voy, compro cospeles y me tomo nuevamente el bus a casa. Me bajo completamente enojada conmigo misma y cuando iba cruzando la avenida pateo un tornillo, sigo caminando pero lo pienso y regreso a buscarlo; porque en ese momento me acordé de alguien que me dijo que si en un mal día te encuentras con un tornillo es porque algo bueno está por ocurrirte.
Así que lo levanté y me volví contenta a casa pensando en esa personita tan especial que estoy segura que algo tuvo que ver con ese hallazgo.
A los 2 o 3 días iba cruzando otra avenida cuando de repente siento que pateo algo, cuando miro era una tuerca y digo en voz alta: ésto no puede estar ocurriéndome de verdad!.
Saco el tornillo que desde el momento en que lo encontré guardé en mi bolso como significante de suerte, buen augurio y de tu presencia permanente en mi vida y para mi desconcierto y sorpresa una encastraba perfectamente dentro de la otra!
Así que desde ese día tanto tuerca como tornillo viajan conmigo a donde vayan y estoy segura de que Ella también.
Segura que desde donde se encuentre está rodeada de todas esas cositas que me hacían y nos hacían felices. Gracias querida mía por hacer, a tú manera, que no me olvide de vos y que me dé cuenta que me protegés desde tú lugar; ése en donde nunca dudé que nos vamos a encontrar.
Gracias Elsita por haber contribuído a mi formación como persona, a mi confianza como mujer y por haber alentado a mi histrionismo junto con mi positivismo.
Gracias por haberme hecho parte de tú vida y regalarme alguno de sus fragmentos.
Gracias por velar mis sueños mientras duermo.
Estoy segura que voy a encontrarte en el momento y en el lugar preciso; porque te sigo buscando en cada rostro, en cada poema o canciñon que conservo como regalo, en cada cuento o libro que leo.
Y estoy segura que voy a finalmente lograrlo.

No hay comentarios.: